INVESTIGACION: AVANCES EN LA CIENCIA

"Una vez mas me fijo, en la parte humana, y admirable, que es esencial para la convivencia..."

Lola Benítez Molina Málaga (España)

 

Los avances en la ciencia abren puertas insospechadas para el hombre. Gracias a aquellos que dedican gran parte de su vida a la investigación, el resto de los mortales podemos mejorar significativamente nuestra calidad de vida y encontrar salidas imprevisibles a grandes males que afectan a nuestra salud y, por tanto, a nuestro bienestar. Una vez más, me fijo en la parte humana y admirable.

              Recientemente, hojeando el Cultural, que acompaña a las incesantes noticias de toda índole, mi mente quedó extasiada, por unos minutos, con el disfrute de saber que nada es imposible. Esta vez acaparó poderosamente mi atención la entrevista realizada al científico y biofísico alemán Erwin Neher, ganador del Premio Nobel de Medicina en 1991, junto a Bert Sakmann, por el apasionante descubrimiento sobre la conexión eléctrica que se produce en las células, lo que acabó dando lugar, según he podido constatar, al 13% de todos los fármacos.

                Gracias al descubrimiento de ambos científicos se pudieron paliar o tratar los síntomas del Alzhéimer, gracias al fármaco denominado Memantina, enfermedad que va en asombroso aumento al incrementarse la esperanza de vida. Palabras de Neher son: “Estoy seguro de que al final tendremos una cura para el Alzhéimer o, al menos, una protección”.

                El fármaco Kalydeco, gracias a los canales iónicos descubiertos, se usa para tratar la fibrosis quística en niños.

                Otra frase suya realmente esperanzadora es: “Estoy convencido de que los nuevos fármacos resolverán el problema, y el cáncer será curable”.

                No cabe duda que gracias al afán de superación, del deseo de saber, de escudriñar, donde otros no se atreven, el ser humano avanza hacia la respuesta coherente de sus propios males.

                Y, como suele decirse, detrás de un gran hombre hay una gran mujer. Su esposa, Eva María Ruhr y él se conocieron en el laboratorio, donde trabajaban, pero como él diría: “Mi esposa abandonó su propia carrera científica y me brindó un apoyo constante para beneficio de mi investigación”. ¡Qué gran ejemplo de amor, sin renunciar a su independencia como persona!

                Una vez más me fijo, en la parte humana y admirable, que es esencial para la convivencia.

                “Habría que financiar más en la investigación básica, es decir, sobre los mecanismos con los que funciona el cerebro. Para poder reparar algo necesitas saber cómo funciona”.

                Frase muy cierta la de Jared Leto: “Intenta y falla, pero nunca falles en intentarlo”.