"Los demócratas se focalizan tratando de entorpecer y descarrilar las gestiones del Presidente Trump con vista a derrotarlo en las elecciones del 2020..."
Por. LUIS G. INFANTE PP # 34028
Yo esperaba ansioso las conclusiones del
Fiscal Especial Robert Mueller con relación al caso de colusión rusa contra el
Pte. Donald Trump; ya fuera que encontrara evidencias sostenibles para
enjuiciarlo políticamente, o contrariamente, que el caso concluyera. Por dos
años la sociedad norteamericana ha vivido en zozobra por este desafortunado
acontecimiento. Al concluir sus conclusiones el fiscal, nos encontramos con una
zaga que apunta a continuar fatigando a la ciudadanía.
Según nos hemos informado públicamente,
se han seguido todos los procedimientos y protocolos que señalan la ley, pero
el empecinamiento de los demócratas y la cobarde parsimonia de los
republicanos, auguran que la trama continuará. Ni unos ni otros se han
comportado han demostrado decencia política.
Algo que llama la atención es el
pronunciamiento del Fiscal, de que sus investigaciones apuntan a que al
presidente no se le exonera de haber quebrantado la ley en algún punto en
particular. Por consiguiente, la pregunta sería: el fiscal está para demostrar
los hechos para un enjuiciamiento, no dar veredictos. Esta actitud de Mueller
trae a la mente la del destituido Director del FBI James Comey que emitió su
criterio de que a Hillary Clinton no se le debería entablar juicio. De acuerdo
a lo poco que conocemos de las leyes de este país, quien debe determinar si se
exonera o se condena a un presunto acusado es a un jurado, a un juez, al
Congreso o en última instancia a la Corte Suprema.
Los demócratas comenzaron acusando al
presidente de colusión partiendo de un dosier parcialmente pagado por la
campaña de Clinton. A medida que se evidenciaba que no había causa probable de
colusión, saltaron a lo de obstrucción de la justicia y abuso de poder. En la
medida que se desvanecía esta posibilidad de culpabilidad, ahora en enfocan en
las finanzas del Pte. Trump y la dirigencia demócrata se empeña en el
"impeachment" o juicio presidencial. De hecho varios aspirantes de la
primaria demócrata llevan como su premisa de campaña el
"impeachment".
Los demócratas se focalizan en tratar de
entorpecer y descarrilar las gestiones del Pte. , con vista a derrotarlo en las
elecciones del 2020. No hay debates serios acerca de la crisis en la frontera
que se empecinan en negar y que pone en peligro la seguridad del país; ya se
olvidaron por el momento de los Dreamers, ni siquiera prestan atención al voto
cautivo de los negros; desconocen, tanto como la gran prensa que no los divulga
suficientemente, los índices económicos así como otros factores favorables.
Es lamentable que este espectáculo este
sucediendo en el país que siempre se destacó - aún con sus deficiencias
perfectibles - por las oportunidades para el desarrollo en el orden individual
y colectivo. La sociedad está extenuada y tiene derecho al sosiego y desde hoy
me atrevo a vaticinar como lo hice en 2016, que con este tinglado armado por
los socialistas del Partido Demócrata con la deshonesta actitud de la gran
prensa, Trump ganará las elecciones del 2020.
Con todos los candidatos izquierdistas
demócratas que llevan el virus comunista, declarándose eufemísticamente
"socialistas progresistas "con ideas populares, como lo hacían
los comunistas cubanos agazapados en el Partido Socialista Popular (PSP),
si el futuro se avizora entre dos tendencias, prefiero vivir explotado
por el capitalismo con alguna esperanza, que no esclavo sin esperanza alguna
con el comunismo.
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