"Hoy en dia el Presidente Socialista del gobierno califica a ese partido VOX como de ultraderecha y ultraconserdador, a la vez que calla ante el discurso de odio al capitalismo..."
El
Partido VOX es un partido político incorporado a la legalidad vigente en todos
los aspectos de la sociedad española y respetuosa de las reglas del régimen
democrático parlamentario y las normas constitucionales y legales del
ordenamiento español dondequiera ocupa o aspira a ocupar cargos cívicos
representativos. Hoy en día el Presidente (Socialista) del Gobierno califica a
ese partido VOX como de ultraderecha y ultraconservador, a la vez que calla
ante el discurso de odio al capitalismo y de menosprecio de la fe religiosa
profesada por una gran mayoría de españoles, por parte de los comunistas y
"compañeros de viaje" del Partido "Unidas Podemos" –que es
el nombre actualmente puesto en su banderín por los comunistas de toda la vida
y otros ultraizquierdistas–. Y contemporiza con las
formaciones políticas secesionistas de Cataluña así como de Navarra y las
Vascongadas. Al mismo tiempo, sin haber renunciado nunca al espíritu de
revancha guerra civilista, que les mantiene en el resentimiento y la
frustración no superados de haber perdido militarmente hace ochenta años la
contienda civil de 1936-1939, las distintas agrupaciones de esa Izquierda se
han concertado para el vilipendio de los Partidos de Centro Derecha (el
Popular) y de Centro Izquierda (el partido Ciudadanos) así como el de Derecha
VOX, tildando la portavoz socialista en el Congreso,
Adriana Lastra, a los dos primeros partidos de haberse "arrodillado"
ante Vox y de "abrazar" el "discurso machista" y la
"ideología del odio" que a su juicio muestra "la
ultraderecha".
Tanto
la extrema Izquierda política española como la Izquierda que ha estado al
frente del Gobierno de España en los periodos dic.1982-julio 1993 (Felipe
González), abril 2004-diciembre 2011 (José Luis Rodríguez Zapatero) y desde junio de 2018 hasta el presente (Pedro Sánchez
Pérez-Castejón) [es decir, durante casi 20 de los 40 años que se han cumplido desde
la promulgación de la Constitución de 1978] han encontrado un terreno común de
agitación política alarmista –y a la vez, distrayente de los verdaderos
problemas y carencias del país– en la cotidiana reivindicación, por
considerarlo un tema de primer orden en la actualidad –como si no hubiera otros
problemas que la ciudadanía necesita ver atendidos urgentemente– de la pronta
exhumación de los restos de Francisco Franco de su tumba en el Valle de los
Caídos a otro lugar de enterramiento escogido por el actual Gobierno
-tramitación que de momento está cautelarmente suspendida por los Tribunales-.
Ese frenesí en la apertura de tumbas y traslado de restos de figuras históricas
del pasado retroactivamente calificadas como "reaccionarias" ha dado pie
al sainetesco desliz de que la alcaldesa de Barcelona, Dª Ada Colau, haya
tachado públicamente de fascista ("facha") al almirante Pascual
Cervera Topete (1839-1909), en la fecha de cuya muerte aun no existía el fascismo –que surgió a raíz de la
Primera Guerra Mundial, transcurrida entre 1914 y 1918–.
Un observador desapasionado podría llegar a la conclusión
de que el
Partido Socialista no busca rebatir con razones las políticas de sus
adversarios en el Centro y en la Derecha, sino simplemente satanizarlos,
mientras hace lo posible por complacer y apaciguar a los verdaderos enemigos de
la democracia española: los comunistas y los secesionistas.
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