PRIMERO COMIDA, LUEGO ETICA

"En cualquier caso,estos valores emancipadores de libertad, diversidad, creatividad y autonomía son los valores de la sociedad libre..."

El dramaturgo alemán Bertolt Brecht, cuando se le preguntó qué pensaba acerca de la ética, descartó la importancia de la ética: "Primero Grub, luego ética". Brecht era un marxista comprometido que, después de vivir en los Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial, continuó viviendo, en Alemania del este después que la guerra terminó. El "Grub primero, luego la ética" de Brecht es inherente a sus creencias marxistas y su lógica socialista.

Su compatriota, el científico político Christian Welzel, explora rigurosamente la búsqueda humana de libertades y cambios históricos en los valores en su libro de 2013 "El aumento de la libertad: el empoderamiento humano y la búsqueda de la emancipación".

Welzel sostiene que, a medida que una sociedad progresa, los ciudadanos se preocupan menos por las necesidades físicas y cambian sus valores hacia lo que él llama "valores emancipadores". Define la emancipación como el deseo humano universal de una existencia libre de dominación. Es decir, la libertad se vuelve más importante para nosotros que la seguridad. Damos más importancia a la diversidad que a la uniformidad. La creatividad gana sobre la disciplina. Y valoramos mucho la autonomía sobre la autoridad, y la individualidad sobre la conformidad.

Algunos estudiosos sugieren que la priorización de valores de Brecht es análoga a la conocida jerarquía de necesidades de Abraham Maslow, donde las necesidades fisiológicas, como la comida y la seguridad, tienen prioridad sobre otras, como las necesidades sociales o del ego. En cualquier caso estos valores emancipadores de libertad, diversidad, creatividad y autonomía son los valores de las sociedades libres. Aquí los llamaré valores de libertad. Ellos contrastan con la seguridad, la uniformidad, la disciplina y la autoridad. Estos son los valores conformistas que conforman la ética de las sociedades marxistas-leninistas.

La investigación anterior del Dr. Welzel se centró en las elites de Alemania del Este desde la perspectiva de la sociología democrática. Su trabajo proporciona información valiosa sobre los cambios en los valores a lo largo del tiempo y en las culturas que observamos en el sur de la Florida. Particularmente los cambios de valor en las olas de la migración cubana a lo largo de seis décadas. Es un cambio en los valores cubanos que angustia a la antigua generación del exilio.

Al estudiar los cambios en los valores a lo largo del tiempo, los científicos tienen en cuenta que los cambios pueden tener lugar por tres razones: un efecto de período, un efecto de edad o un efecto generacional. Un efecto de período es simplemente un cambio en los tiempos. Un efecto de edad explica cómo nosotros, como individuos, cambiamos con el tiempo; y un efecto generacional captura cómo la cohorte de personas nacidas en un momento determinado llevará los rasgos de esa generación a lo largo de sus vidas. Las cohortes estadounidenses comunes son: la Generación GI (nacida entre 1900 y 1924); la Generación Silenciosa (1925-45); Los Baby Boomers (1946-64); Generación X (1965-79); y Millennials (1980-2000).

Por ejemplo, mis valores como un Baby Boomer de 1948, el exilio de Pedro Pan de 1961, con exposición a la vida tanto en la Cuba republicana como en la comunista, y toda una vida de vida y aprendizaje en la libertad de los Estados Unidos, han sido moldeados por esos Periodos, Edad y Efectos generacionales. Mis valores de libertad no serán los mismos que los de un Milenio recién llegado de las privaciones de la Cuba comunista. Esos valores pueden estar comprensiblemente más cerca de "Grub primero, luego ética" de Brecht.

Welzel muestra que los valores emancipadores de la libertad, la diversidad, la creatividad y la autonomía resultan de la expansión de los recursos, como el acceso a la información y la integridad de las instituciones de un país. El setenta por ciento de la variación en los valores de libertad entre países puede explicarse mediante medidas en el Índice de conocimiento del Banco Mundial. En otras palabras, el conocimiento y las instituciones honestas contribuyen significativamente al progreso moral.

La libertad, la diversidad, la creatividad y la autonomía son valores que "desbloquean las cualidades intrínsecas de una población, vitalizan la sociedad civil y crean capital social". Estos valores de libertad son cruciales para cualquier proceso de democratización ascendente. En la medida en que los esfuerzos de “Grub primero, luego ética” logren separar a los pueblos de sus valores de libertad, tales esfuerzos facilitan la opresión.

El aumento de los valores de libertad tiene un efecto mucho mayor en la expansión efectiva de los derechos que los derechos pronunciados en el aumento de los valores de libertad. Las instituciones, tan esenciales como lo son para la democratización, no pueden crear cualidades de empoderamiento en las personas. La democracia fluye, no de las instituciones, sino del deseo de emancipación de un pueblo.

Para aquellos que están contentos con los valores "grub" de seguridad, uniformidad, disciplina y autoridad; Los valores de libertad son solo una aspiración opcional para el futuro. Para mí, la libertad es un valor necesario para la vida.