" Uno escucha tantas calificaciones, que a veces se confunde. Ahora tenemos esa costosa campaña, para hacer de la posición de alcalde en la ciudad de Miami, un alcalde con poderes ilimitados..."
– ¡Pero don Sindulfo…! ¿Qué trae usted ahí?
– ¡Ya lo ve!...
– ¡Sí! Ya lo veo… Una patineta, pero que es eso, ¿qué
hace usted con semejante artilugio?
–No lo sé. Un lector
del periódico me la regaló, asegurándome que es más seguro andar en patineta
que en bicicleta dentro del infernal tráfico de Miami…
– ¿Y usted le ha hecho caso?
– Bueno… No estoy
muy convencido, pero están ocurriendo tantas cosas inexplicables, que
cualquiera de ella nos puede confundir…
Don Sindulfo había
llegado a la oficina del periódico, donde había sido citado por el señor
director, con el rostro sudoroso cargando en su hombro derecho una pesada
patineta.
–Ciertamente están ocurriendo cosas complicadas a la hora
de entenderla, pero… ¡don Sindulfo...! –Exclamo burlonamente el señor director– comparar la utilidad de una
patineta con su bicicleta… es demasiado… ¿No lo cree usted?
–Lo acepto señor
director, pero… Uno escucha tantas calificaciones, que a veces se confunde.
Ahora tenemos esa costosa campaña, para hacer de la posición de alcalde en la
ciudad de Miami, un “alcalde” con poderes ilimitados, y para encapuchar esa
condición, intentan bautizarlo con la de “alcalde responsable”, como si la
responsabilidad fuera una opción y no una condición obligatoria para todos los
servidores público, y en resumen… para todos los ciudadanos.
– Bueno debemos reconocer, que efectivamente no todos los
elegidos por los ciudadanos, han mantenido una condición, de “responsables”; en
el mejor sentido de la palabra. Recuerde que antes hubo otro Suarez, como
alcalde de la ciudad de Miami…
– ¡S! El padre del actual, Pero no
creo que se refiera al tiempo en que
este ocupo la alcaldía de Miami, aunque algunas muestras de irresponsabilidad,
si dejó tras su gobierno, entre ellas, un estadio, –MIAMI ARENA– que a la
hora de su inauguración ya era obsoleto y que apenas unos años más tarde hubo
de ser derrumbado y se perdieron varios cientos de millones de dólares, que
costara su edificación.
– ¡Tal vez ese sea el motivo que ha inspirado esta campaña…!
– ¡Bueno…! si esa es la motivación, lo
podrían resolver con una solicitud de
disculpa… pero lo que parece es otra cosa. Hay mucho dinero invertido en la campaña,
y lo único evidente es que el joven Suarez, quiere estrenar la fuerza que le
brindaría esa posición; si los tontos de siempre se dejan embaucar….
– Don Sindulfo, –medio el señor director– no debe usted calificar
de tontos, a muchos de los que serán engañados…
– ¿Y cómo hemos de calificar, a los
que acepten “la milonga”, de que el brindarle a alguien tanto poder, le
garantiza a ellos lo mismo… cuando en realidad es todo lo contrario. Ahora tienen un administrador, que de hecho es un empleado del
alcalde y los concejales. Y estos de alguna manera lo pueden fiscaliza, o hasta
despedir, si fuera necesario. Pero… ¿qué va a pasar cuando el administrador sea
el propio alcalde? ¿Quién tendrá suficiente poder para despedirlo…?
– ¡Lo entiendo! Pero hay mecanismos para destituirlo…Eso ha
ocurrido antes...
– ¡Sí! Una elección especial, una
especie de “recalls”, como le llaman. Pero resulta extremadamente difícil,
de hecho es casi imposible, por lo sofisticado de los elementos que se requiere
para organizarlo. Lo que no ocurre, cuando el administrador, es solamente un
empleado calificado, que está fallando… O sea que para despedir a lo que salga
de la enmienda se necesitaría la movilización de todos los votantes. Mas
claro..Que aceptar a este llamado “alcalde responsable”, restaría el poco poder que ahora tienen los
votantes… ¡como le dije antes: es “una milonga”, un fraude electorero…
–Creo que lo entiendo don Sindulfo, pero le voy a hacer una
confesión…
– ¿Y qué puede ser esto?
– A mí… lo que más me preocupa, son algunos de los nombres que
aparecen defendiendo la enmienda… Recuerde ese pasaje de la Biblia: “Por sus hecho os reconoceréis”
– ¡Claro…!
–Pues que varios de los principales voceros, son al mismo
tiempo miembros de la comparsa de
neo-aperturistas económicos, que quieren acercar a los empresarios del sur de
La Florida al gobierno castrista. Uno de los que más activo está, es Joe Arriola, que descaradamente lidera este
plan, que se puede calificar de neo-castrista, ¡Nada...! Una pura izquierda
socialista, en el corazón de la Pequeña Habana…
–Esa es la principal pista. “los
miembros de la manada”, pero lo último que le aconsejo a los que no quieran ser
incluidos entre los tontos que hablamos al principio, es que además de
identificar a estos; a los que usted se refiere, es que lean la enmienda, ésta
se puede encontrar por “internet”, y habla claramente de todo el poder que
otorgara al señor alcalde., que podría vetar cualquier decisión legislativa que
no le guste… ¡Vaya, que sobrarían los concejales y todo los demás elegidos por
el voto ciudadano...!
–Bueno don Sindulfo, es realmente trágico, pero creo que solamente
en fraude moral y político del llamado alcalde responsable, no es lo que lo
tiene a usted tan confundido; como para aceptar que es más seguro viajar en una
patineta…
–Tiene razón. Es el cumulo de sucesos
que se nos avecinan, lo que me tiene descolocado.
– ¿Cómo por ejemplo?
–
Bueno uno de ellos puede ser, localmente, la contienda por el distrito
27, entre María Elvira Salazar y Donna Shalala, con la presencia de este
espontaneo, ¡más bien espontanea!, llamada Joli, que se lanza al ruedo, diciendo que es la
verdadera representante de los republicanos, pero que, sin embargo, está
actuando como un topo para favorecer a la Shalala. Ella y los que están detrás,
saben que todos los votos, que no serán muchos, que ella desvíe son votos de María Elvira, que tampoco le van
a sobrar. O sea, que lo que está claro es que su participación beneficia a los
demócratas, y no sería un absurdo pensar que tras la campaña de la Joli, haya
dinero demócrata, que no ven nada fácil la victoria de la social
izquierdista Shalala.
– ¿Quiere usted decir que no es genuina la intención de competir,
de Joli?
– ¡Bien! Legitima, puede ser, pero
razonable e inteligente, no creo. Está
claro que, ya sea por una rabieta, por frustración o, en menor grado por
ignorancia, y sabiendo ella que no tiene
posibilidades de ser electa, al menos en estos momentos, lo que busca es
perjudicar a María Elvira, que es la más cercana a sentarse en la poltrona del
distrito 27, pero que desde luego no necesita que le abran un segundo frente.
– ¡No! No creo que le guste tampoco,
pero es evidente que ambos partidos han puesto toda la carne en el asador, y
esto nos promete unas elecciones muy movidas, y que podría también ser
definitoria sobre el futuro de nuestra sociedad… ¿Y de la patineta… la va usted a
utilizar...
–¡¡…creo que no!!
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