"La confrontación social no violenta heredaba nuestro ideal del Estado de Derecho.."
Ramiro Gómez
Barrueco (Ex preso político. Escritor. Empresario.)
La
extinción de nuestro Estado de Derecho fue la razón vital de nuestra oposición
a la tiranía castrista. El mutis indolente, aparente o conveniente, nos hacía cómplices
de las constantes violaciones perpetradas en 1959 a La Constitución de 1940. Cómplices
también de la inexistente convocatoria a elecciones libres y de las falsas
promesas de paz nacional que garantizaban que no habría vencedor ni vencido.
Estos compromisos sintetizaban el espíritu y la razón de ser de “La Revolución”.
Desde 1959,
simpatizantes y miembros del depuesto gobierno, naufragaron en ese pantano de
injusticias: desde juicios sumarios injustificados hasta la estigmatización
social. Finalmente naufragó La Nación.
La Historia
se encargó de demostrar que el Presidente Revolucionario, El Consejo de Ministros,
los jefes y muchos oficiales de las fuerzas armadas, así como muchos
revolucionarios, sí estaban comprometidos con los valores democráticos que decían
defender. Lo demuestra plenamente el libro “Confrontación” (historia de los años
1959-60) del prestigioso escritor y columnista del Nuevo Herald, Pedro Corzo, libro
que será presentado el 3 de mayo en 4000 West Flagler Street.