sábado, 9 de julio de 2016

RAUL CASTRO: LA LEYENDA DE "MUSITO" UN MODESTO ASESINO

Por Adam Dehoy ESPECIAL PARA ENFOQUE 3 DIGITAL


Raúl Modesto. El quinto de siete hermanos del matrimonio formado por Ángel Castro y Lina Ruz, nació en la finca de su padre, en la zona conocida por Birán en la provincia de Oriente, un 3 de junio de 1931. Su infancia transcurrió, junto a sus hermanos en la finca familiar y se caracterizó por su cercanía a su madre, quien cariñosamente lo llamaba “Musito”.
A los cinco años fue enviado a estudiar de interno, junto a sus hermanos Fidel y Ramón al colegio Hermanos La Salle, y luego al Colegio Dolores, ambos en Santiago de Cuba. Posteriormente continuó estudios en el Colegio de Belén, en La Habana, donde también estudiaba su hermano Fidel. Sin embargo, su paso por dicho colegio, no fue nada satisfactorio, debido a sus malos resultados académicos, por lo que fue expulsado, culminando sus estudios en un colegio militar. Yendo más tarde a trabajar junto a su padre en las labores dentro de la finca familiar, hasta que por pedido de su hermano, lo envían de nuevo a la capital, esta vez con la intención de estudiar Administración Pública en la Universidad de La Habana.

MUSITO EN LA HABANA
Ya en La Habana, por su voz aflautada y rostro lampiño, algunos compañeros lo tildaban de afeminado, calificativo que a él  no parecía importarle. Mientras comenzaba en la Universidad  una diplomatura en ciencias sociales que tampoco terminó, debido a sus actividades políticas. A diferencia de Fidel, quien comenzaba a destacarse como líder estudiantil dentro de Partido Ortodoxo, Raúl se acercó a movimientos comunistas y se unió a la Juventud Socialista, del Partido Socialista Popular (PSP). Organización política de corte soviético.
          En 1953, a los 22 años, realizó su primer viaje fuera del país, participando en la Conferencia Internacional de Defensa de los Derechos de la Juventud realizada en Viena, y luego en Bucarest, en la reunión del comité organizador del IV Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes. Durante su viaje de regreso a La Habana, en el barco Andrea, conoció al agente secreto de la KGB Nicolai Leonov, quien viajaba de camino a hacerse cargo de su puesto en la embajada soviética en México; encuentro que años después seria transcendental en las relaciones entre Cuba y URSS.
         

 

De regreso a La Habana, se une al movimiento dirigido por su hermano, dentro del Partido Ortodoxo, que se oponía al gobierno de Fulgencio Batista, participando en el fracasado  ataque al Cuartel Moncada, el 26 de julio de 1953, considerado el inicio de la Revolución Castrista. Los dos hermanos fueron capturados por la policía junto a otros miembros del ataque al cuartel, pero la intercesión del arzobispo de La Habana Monseñor Enrique Pérez Serantes, les libró de posibles represalias, siendo juzgados y condenados a 13 años por sedición y liberado en mayo de 1955 gracias a una amnistía general.
RAUL MODESTO EN MEXICO Y LA SIERRA
Tras su liberación se traslada a México y ayuda a su hermano en la organización y captación de adeptos para sus nuevos planes. Allí restableció sus relaciones con el agente Nicolai Leonov, quien ejerció gran influencia sobre la incipiente guerrilla. A fines de 1956 Raúl junto a su hermano y otros ochenta compañeros, desembarcan por la costa sur de de la provincia de Oriente, la mayoría son muertos o detenidos y unos diez o doce, entre ellos Fidel, Raúl y Ernesto Guevara logran huir, internándose en la Sierra Maestra y dando comienzo a la lucha que conduciría a la toma del poder por parte de la llamada revolución.
           Durante la guerra de guerrillas, que apenas se prolongó  un año (1957-1958) Raúl Castro ordenó, y en algunos casos participo en 34 ejecuciones de campesinos acusados de diversos “delitos” entre lo que encontraron robo de un caballo, o abandono de un puesto de guardia.
     Ya con el rango de mayor, “Musito” logró abrir el segundo frente, en la Sierra Cristal ganando además el reconocimiento de una férrea disciplina mientras ejecutaba una maniobra que al final fuera decisiva en el resultado de la guerra, cuando secuestró a 46 estadounidense, para presionar al gobierno norteamericano a que suspendiera toda ayuda económica o militar al gobierno de Fulgencio Batista.
“MUSITO” TRAS LA FUGA DE BATISTA
Tras la fuga de Batista, Raúl, estuvo al frente del fusilamiento, el 14 de enero de 1959,  de 72 miembros del ejército que se encontraban en el Cuartel Moncada durante el asalto de los insurgentes. Bajo la consigna de: “si uno solo es culpable, todos lo son”. Fueron condenados a muerte sin previo juicio.
        Se le acreditan más de 250 fusilamiento del 1 al 6 de enero de 1959, y aproximadamente más de 500 durante el año 1959. El solo hecho de haber sido miembro, en cualquier nivel del ejército lo convertía, según las leyes revolucionarias, en “criminales de guerra” y podían ser condenados a muerte.
           El sistema de fusilamiento era frecuentemente igual, se abría una zanja donde caerían los cuerpos asesinados que eran cubiertos de tierra después por una “bulldoser”. Muchos fueron enterrados vivos, según informaciones de algunos periodistas que fueron testigos.
            En 1966, Raúl Modesto Castro, decidió hacer desaparecer los cadáveres del fusilamiento del 14 de enero del 1959. Dio órdenes de construir pesados ataúdes de cemento, que fueron llevados en barcos a alta mar y lanzados a las profundidades al sur de la provincia de Oriente, para que jamás volvieran a la superficie.
CRISIS EN LA REVOLUCION
            Raúl Castro, como jefe del ejército ordenó la ejecución de Arnaldo Ochoa, Amado Padrón, Antonio de la Guardia y Jorge Martínez, el 12 de julio de 1989; tras ser declarados culpables de trafico de drogas y traición a la revolución.
          Bajo las órdenes directas de Raúl Castro y Ernesto Guevara, fueron asesinados la mayoría de los 5700 cubanos que por diversos motivos terminaron siendo ejecutados  por la revolución castrista.
         A esta altura, este adocenado asesino es aceptado como “presidente” del gobierno cubano y calificado falsamente como un caballero, por otros que parecen tener mentes tan retorcidas como la él.
 
 

2 comentarios:

  1. EXCELENTE TRABAJO DEL VALIOSO COLEGA. CON ARTICULOS COMO ESTE, ENFOQUE 32 SIGUE COLABORANDO CON LA LUCHA CONTRA EL MALDITO CASTRISMO, REVELANDO EL INTRINGULIS DE LA MAS ABERRANTE DICTADURA DE LATINOAMERICA.

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  2. Hola Hermanos, este artículo reafirma que el Moncada y la Sierra maestra fueron un fraude del comunismo internacional con la anuencia y participación de los Castro. Los festivales de la juventud y los estudiantes no eran otra cosa que una convocatoria comunista para elegir y coordinar acciones con los futuros "cuadros" del PC. Raúl "coincide" con el KGB en Viena y en México, Fidel y Leonov repiten las mismas palabras rn México "Héroes o mártires", demasiado casualidades!!!

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